TIZIMIN, Yucatán, 3 de enero.- Los narcotraficantes temblaron la noche del sábado ante la llegada de elementos del Ejército Mexicano, que catearon varios predios de la ciudad, entre ellos la casa de Gustavo Monforte Osorio (a) “El Chocolomo”.Sin embargo, fuentes confiables informaron que todo parece indicar que alguien les dio el “pitazo” y salieron huyendo sin que los castrenses pudieran capturar a alguno de los que buscaban.
De acuerdo a los datos recabados, un teléfono celular que los militares encontraron en el predio de “El Chocolomo” confirmó que minutos antes recibió el aviso por medio de un mensaje de texto, en el que le informa “vótense a la verga, están próximos los verdes”.
Lo que expresa el mensaje se cumplió cuando los militares catearon los predios de varios socios de “El Chocolomo” y no encontraron a ninguno de los señalados por un detenido que aportó datos para realizar este operativo.
Testigos aseguran que “El Chocolomo” pasó cerca de su casa de la colonia Benito Juárez mientras los militares estaban en el interior. Manejaba una camioneta de color blanco, en la que se le ha visto en los últimos días paseándose en calles de la ciudad.
El vehículo, según fuentes confiables, es de su amigo “Meco Avila”.
“El Chocolomo” pasó cerca de su casa, observó el movimiento militar y tranquilamente se alejó sin que pudiera ser identificado.
Casi a las doce de la noche el convoy militar se retiró del predio del conocido narcotraficante y se dirigió a otra casa señalada como punto de venta, donde tampoco hubo ningún detenido, pero encontraron indicios de que el morador también recibió a tiempo el aviso.
Este predio se encuentra en la misma colonia en la que habita “El Chocolomo”, ahí encontraron una “piedra”, así como signos de que quien lo habita efectivamente está ligado con el narcotráfico y pertenece al grupo que aún controla “El Chocolomo”.
Los tizimileños se han sorprendido en los últimos meses cuando por las calles se topan con “El Chocolomo” paseándose en un vehículo tipo Mustang con una franja divisora de color negro, y que de manera constante estaciona frente a la guardería subrogada por el IMSS, en donde labora su esposa.
También se le ve con frecuencia en la camioneta de color blanco con un signo de pesos en el medallón trasero, con la que se acercó sin que fuera descubierto mientras los militares cateaban su predio, donde sólo estaba su esposa, quien dijo desconocer el paradero de su marido.
Además de estos dos predios citados se habla de otros más en los que de igual forma los militares no hallaron a sus moradores.
(POR ESTO! / Policía)
Lo que expresa el mensaje se cumplió cuando los militares catearon los predios de varios socios de “El Chocolomo” y no encontraron a ninguno de los señalados por un detenido que aportó datos para realizar este operativo.
Testigos aseguran que “El Chocolomo” pasó cerca de su casa de la colonia Benito Juárez mientras los militares estaban en el interior. Manejaba una camioneta de color blanco, en la que se le ha visto en los últimos días paseándose en calles de la ciudad.
El vehículo, según fuentes confiables, es de su amigo “Meco Avila”.
“El Chocolomo” pasó cerca de su casa, observó el movimiento militar y tranquilamente se alejó sin que pudiera ser identificado.
Casi a las doce de la noche el convoy militar se retiró del predio del conocido narcotraficante y se dirigió a otra casa señalada como punto de venta, donde tampoco hubo ningún detenido, pero encontraron indicios de que el morador también recibió a tiempo el aviso.
Este predio se encuentra en la misma colonia en la que habita “El Chocolomo”, ahí encontraron una “piedra”, así como signos de que quien lo habita efectivamente está ligado con el narcotráfico y pertenece al grupo que aún controla “El Chocolomo”.
Los tizimileños se han sorprendido en los últimos meses cuando por las calles se topan con “El Chocolomo” paseándose en un vehículo tipo Mustang con una franja divisora de color negro, y que de manera constante estaciona frente a la guardería subrogada por el IMSS, en donde labora su esposa.
También se le ve con frecuencia en la camioneta de color blanco con un signo de pesos en el medallón trasero, con la que se acercó sin que fuera descubierto mientras los militares cateaban su predio, donde sólo estaba su esposa, quien dijo desconocer el paradero de su marido.
Además de estos dos predios citados se habla de otros más en los que de igual forma los militares no hallaron a sus moradores.
(POR ESTO! / Policía)
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